martes, 28 de octubre de 2008

Gipsy.cz, hip hop y folk gitano.

Gipsy.cz puede considerarse la gran revelación en el actual panorama musical de la República Checa. Se trata de un grupo integrado por cuatro jóvenes gitanos con un gran talento musical que mezcla géneros tan distintos como el folk de su país y de su etnia con el rap, el hip hop o los sonidos electrónicos

En 2006, la formación, liderada por Radoslav “Gipsy” Banga ganó el premio Talento de año, otorgado por la Academia de la Música Popular Checa. El primer álbum de la banda titulado Romano Hip Hop se convirtió en uno de los discos más vendidos del país. La canción homónima conquistó altas posiciones en las listas de popularidad checas y posteriormente se impuso también en la World Chart Express de la MTV europea.

La combinación de hip hop con la música gitana tradicional de Gipsy.cz es muy singular en el escenario checo. Esta fusión surgió durante las improvisaciones del violinista Vojtěch Lavička y el rapero Radoslav Banga. Vojtěch Lavička empezó su carrera desde niño como violinista de grupos folclóricos y se trata de un maestro de la improvisación capaz de tocar cualquier género, desde temas altamente veloces a los tonos gitanos más melancólicos.



Las canciones de Banga lograron rápidamente cautivar a un amplio sector de los jóvenes checos y europeos con letras que tienen un profundo mensaje social de actualidad, son verdaderas declaraciones de amor o cuentan historias jocosas que divierten a todos los públicos. Canciones en romaní, que gracias a su temperamento se han convertido en éxitos que se tocan las discotecas de las mayores ciudades checas.

La fama del grupo gitano que hace rap, hip hop, música étnica y folclor superó pronto las fronteras checas, a tal punto que la MTV les tuvo durante varias semanas como grupo revelación.


Debido al carácter social de muchas de sus canciones, el grupo Gipsy.cz ha desempeñado un papel importante en la denuncia de injusticias y discriminación, al tiempo que exhorta a los gitanos checos a trabajar por una mayor integración en la sociedad de su país.


Más info: http://www.gipsy.cz/


Romano Hip Hop



martes, 21 de octubre de 2008

Una canción de largo recorrido


Whiskey in the Jar es una canción tradicional irlandesa que cuenta en primera persona la historia de un bandolero que asalta a un capitán llamado Farrel para llevar el dinero del botín a su novia Molly, pero ella le traiciona, ocultando en su casa al mismo capitán al que el bandolero había asaltado. Cuando éste se ve sorprendido, dispara al capitán pero es detenido y encarcelado.
Es una de las canciones irlandesas más interpretada y versioneada tanto por artistas tradicionales como por los pertenecientes a otro estilos.

En 1973, el mítico grupo Thin Lizzy hizo una versión que se convirtió en uno de sus grandes éxitos. En 2000 Metallica hizo otra versión por la cual obtuvo el Grammy a la «Mejor interpretación de rock duro».
Ahí van versiones muy distintas de una misma canción, ¿con cual os quedáis?:


The Dubliners (versión tradicional en directo)

Thin Lizzy (mítica versión de la banda de Phil Lynott)


Johnny Logan and Friends (un poco cursi)

Guezos - Whisky e Licor (version libre en castellano) incompleta

Nithel (versión dance)

Metallica (a lo bestia)

The Pogues (con The Dubliners)


U2 (en directo en Dublin)

Glamour Djs (version disco)

miércoles, 15 de octubre de 2008

Noa, una diva global.


Achinoam Nini, Noa, es la más destacada artista israelí y una de las grandes divas internacionales del panorama de las denominadas músicas del mundo. Nacida en Tel- Aviv en 1969, vivió en Nueva York desde los dos años hasta que regresó a Israel a los 17 donde, una vez finalizado el servicio militar (Noa se pasó dos años recorriendo Israel en un grupo musical del ejército), estudió música y conoció a su compañero y colaborador Gil Dor. Juntos han escrito y realizado varios álbums en Israel y otros discos para el mercado internacional, en ambos casos con gran éxito.

Noa y Gil han tenido diferentes tipos de formación desde sus primeras actuaciones como dúo acústico. Su más larga relación musical es la que mantienen con el extraordinario percusionista Zohar Fresco Los tres han tocado en cientos de conciertos en todo el mundo. Recientemente han añadido al cuarteto napolitano de cuerda Solis String Quartet a sus actuaciones en directo.
La música de Noa está a medio camino entre el exotismo y la magia de los sonidos de sus orígenes, en Israel y Yemen, así como lo puramente contemporáneo de su estancia en Estados Unidos, donde vivió desde los 2 años.

En directo Noa sorprende por su voz dulce y poderosa, utilizando el inglés, el hebreo e incluso el español, en un espectáculo intimista, lleno de sonidos diversos que convergen en un estilo único, mezcla de jazz, folk, rock, sonidos étnicos…

Férrea defensora del diálogo para la consecución de la paz entre israelíes y palestinos, ha participado en diversos eventos, en los que muestra su acercamiento a otras religiones y culturas: fue la primera artista israelí oficialmente invitada a girar en Marruecos, ha actuado en varias ocasiones en el Vaticano, y ha cantado en numerosas ocasiones junto a músicos palestinos y de otros países árabes, como el argelino Khaled.


I don´t know



Mishaela


Beautiful that way

Blue touches blue

viernes, 10 de octubre de 2008

Haydamaky: etno-punk.



Haydamaky es uno de los primeros grupos ucranianos que saltan a la escena internacional firmando con una multinacional. Su mezcla de música tradicional de los Cárpatos con ska, punk, heavy, rap o reggae les ha llevado a ser una de las bandas más populares de su país. El grupo comenzó en 1991, cuando Ucrania se independizó de la Unión Soviética. Desde entonces han ido sumando nuevos miembros y acercándose cada vez más a la música folk de regiones de su tierra como Bucovina, Polesia o los Carpatos y también de los vecinos Balcanes. En 2001 adoptaron el nombre de Haydamky, en honor a los guerrilleros que en el siglo XVIII se sublevaron contra los ocupantes polacos.


Sus canciones fueron himnos del pueblo en los recientes días de la Revolución Naranja, lo que facilitó que su música traspasase las fronteras de su tierra. En los dos últimos años han girado por los escenarios de europa occidental y oriental y han participado en prestigiosos festivales de músicas del mundo, recibiendo varios premios.




La música de Haydamaky destila un profundo respeto por la cultura de su tierra y establecen una conexión entre el pasado y el presente. Recuperan las viejas melodías de las zonas rurales de los Carpatos pero las interpretan con una actitud punk (en ese aspecto, recuerdan a los legendarios The Pogues). A los instrumentos del rock (batería, bajo, guitarra) le suman la mandolina, las flautas, el acordeón o las trompetas. El resultado son temas vibrantes y un poco salvajes, interpretados por músicos que disfrutan con lo que hacen y que además son excelentes intérpretes.

Message

If you have no bread

Kohania


Trompita

miércoles, 8 de octubre de 2008

Lucinda Williams, recuperando clásicos de la carretera.


Se reedita casi diez años después 'Car Wheels On A Gravel Road' de Lucinda Williams, disco imprescindible para los que gustan de la auténtica música americana de raíz. Rock, folk, country y bluegrass con estupendas guitarras y la gran voz de la descomunal Lucinda Williams.

La cantante nacida en Lake Charles grabó esta obra maestra con la colaboración de músicos del nivel de Steve Earle, Emmylou Harris o los guitarristas Gulf Morlix, Buddy Millar, Bo Ramsey y Ray Kennedy. Hoy es un clásico.

Puede ser considerado como el mejor de sus (excelentes) discos, ahora reeditado con más canciones y con un concierto en directo extra. 'Car Wheels On A Gravel Road' está en la mayoría de las listas de los mejores 100 discos de la historia del rock. Un disco total, sin una sola canción mala, sin un minuto innecesario, sin un acorde superfluo.

Os dejo la opinión de otro blogero sobre este trabajo porque yo no puedo expresarlo mejor: "Hay discos que, cuando los pones en el reproductor, suenan a madera. Otros llenan el aire de vapor de anfetaminas, los hay que lo inundan de humo opiáceo y también están los que echan polvo, gasolina y grava. Car wheels on a gravel road es uno de ellos. Lucinda Williams estruja el tarro de las esencias del sonido americano en este disco que ahora cumple ocho años. Mientras durante los noventa el mercado europeo estaba saturado de grupos británicos, en Estados Unidos salían artistas de debajo de las piedras –todavía hoy- que no cruzaban el charco. La chica del gorro vaquero con miedo a volar iniciaba su carrera en solitario a finales de los setenta con álbumes que la crítica califica modestamente –debe ser difícil conseguirlos-.

Tras la reedición de sus primeros discos, reclama su sitio con Sweet Old World, en 1992, pero desaparece hasta que seis años después hace esta obra maestra sobre la vida en Louisiana y Texas, sobre ángeles borrachos, promesas rotas y silencios que han de ser guardados. El disco mezcla guitarras eléctricas de doce cuerdas con armonías vocales cercanas a The Band –Right in Time-, mandolinas y slide tocados bajo la sombra de un acordeón –Concrete and Barbed Wire- y guiños a los Rolling en algunos riffs de guitarra –I Lost It-. Pero, por mucho que lo intento, no encuentro palabras para describir Greenville, un dueto con Emmylou Harris en el que cantan al oído de los peor parados de la historia. Letras sobre perdedores, lugares remotos de Estados Unidos, rabia contenida o desatada, borracheras que acaban mal y carretera. Mucha carretera, poco dinero, una guitarra y tanto whisky como polvo para tragar".

(Blog Los archivos lúcidos http://pedrogonzo.blogia.com/2006/octubre.php)

Más info: http://www.lucindawilliams.com/


Right in time


Car Wheels On A Gravel Road

Drunken angel

I envy the wind

martes, 7 de octubre de 2008

Lila Downs, orgullo indígena.


La música de Lila Downs pertenece a las dos riberas del Río Grande: México y Estados Unidos. Heredera de dos culturas, la mexicana y la norteamericana, la cantante de Oaxaca recupera y reinventa la música tradicional mexicana.

Hija de un norteamericano, de origen escocés, y de una mujer mixteca, Lila comenzó a cantar con mariachis a los ocho años. A los catorce inició sus estudios de canto en la ciudad de Los Angeles, California, y continuó estudiando en la ciudad de Oaxaca de Juárez. Volvió nuevamente a Minnesota donde estudió canto y antropología social en la Universidad de Minnesota.

Casi casi se convierte en cantante de ópera. La facultad le aburrió y cambió de planes. Pudo más Lola Beltrán, Cesárea Evora, Virginia Rodriguez y más allá Miles Davis y Woody Guthrie. Se hizo antropóloga. Pudieron más las mujeres indígenas, el interés por las raíces, la etnia, el significado de las costumbres y los símbolos de una cultura propia y ajena. La recuperación de una cultura que la impregnó escuchando a su madre.

Yo la conocí en 2001 a través de su disco "La línea (The border)", dedicado a todos los latinoamericanos que se juegan la vida intentando alcanzar los Estados Unidos para caer, en su mayoría, en la marginación y la explotación laboral. Lila sorprendía por su frescura pero sobre todo por los sonidos mestizos de la música de la etnia mixteca, la más conocida música mexicana y el tex-mex. Y como no, por su voz.


Me preocupé luego por conocer sus trabajos anteriores y por seguir lo que ha ido haciendo desde entonces (como ganar el oscar a la mejor banda sonora original por la película sobre Frida Kahlo). “La sandunga”, editado en 1997, es su primer trabajo realizado a partir de la música tradicional de Oaxaca. “Yutu Tata” (Árbol de la vida), el siguiente, está inspirado en las imágenes de los códices mixtecos. Sus letras -cantadas en castellano y en lenguas indígenas como el mixteca, el zapoteca o el maya- constituyen un testimonio de misticismo y la filosofía del México prehispánico.

Al respecto de la situación de los pueblos indígenas americanos Lila opina que "uno de los temas que más me interesa es pensar que podemos seguir retomando la cultura indígena y, al mismo tiempo, vivir una realidad moderna. Junto con otros compañeros de las comunidades triquis, mixtecas y zapotecas de Oaxaca, he crecido pensando que todas nuestras comunidades indígenas necesitan una autonomía política y legal, y un gran respeto de parte de todos. Sus lenguas e ideas de nación deben permanecer, sin olvidarnos de lo que ocurre en el mundo, porque formamos parte de este todo."

Luego vinieron trabajos como "Una sangre" o el fántastico "La Cantina", un puñado de canciones etílicas, trágicas y de desamor que evocan a la gran Chavela.

Su último disco "Ojo de Culebra (Shake away)" de 2008 cuenta con grandes colaboraciones, algunas españolas como Enrique Bunbury o La Mari de Chambao. En esta ocasión, se inspira en la cultura chamánica de los indígenas mexicanos. Cantos que ayudan a sanar el alma. Quien sabe, tal vez sea cierto.

Más info: http://www.liladowns.com/

La iguana


El feo

El corrido de Tacha

Justicia (con Bunbury)

Cumbia del Mole